¿Cómo hacen en el Grupo Clarín los periodistas que allí escriben para sobrevivir entre tanta incongruencia, negando todo el tiempo y haciéndose los que no ven? ¿Cómo hacen para escribir con una mano lo que luego borran con la otra?
Ésto dice la nota de Clarín.com, firmada por Adriana Santagati, el día 25/03/2010:
PUNTO DE VISTA
El derecho a la información
Por: Adriana Santagati
El de la información es uno de los derechos más importantes que tienen los consumidores. De hecho, la ley 24.240 obliga a las empresas a "suministrar a los consumidores o usuarios, en forma cierta y objetiva, información veraz, detallada, eficaz y suficiente sobre las características esenciales de los mismos". La obligación de informar también alcanza al Estado para transparentar el sistema y permitir que los consumidores tengan un efectivo conocimiento y decisión sobre la oferta de los privados. En el caso de las tarifas de micros, esta obligación se cumple a medias. Puede decirse que la CNRT hace lo que establece la misma resolución 257/9 ("Los datos relevados estarán a disposición de los actores y usuarios del sistema"), pero no en la forma accesible y masiva que resulta imprescindible para que este control funcione.
¿Se referirá a la falta de "información CIERTA Y OBJETIVA, VERAZ, DETALLADA, EFICAZ Y SUFICIENTE que NO brinda el medio al que ella pertenece, con sus informaciones tendenciosas, sus noticias negadas, o ninguneadas, sus editoriales sesgadas, sus notas sin firma, con sus tapas llenas de mala intención, ejerciendo presión a los poderes estatuídos del Estado?¿No debería el Ejecutivo declarar la EMERGENCIA INFORMATIVA por el atropello a los derechos de los ciudadanos a estar informados, y que este medio (a través de todos sus formatos) incumple?
¿La nota hará alusión, tal vez, a la publicidad engañosa de la inexistente empresa Fibertel, que NO INFORMÓ debidamente a los usuarios sobre la real situación de la misma, que continúa incorporando usuarios, y que insiste en informar que todo está perfecto, todo legal, todo en orden, todo bien, que la empresa "no va a desaparecer", cuando en realidad, NO EXISTE por propia decisión de sus propietarios...? ¿Estará al tanto esta periodista de la forma en que desinforma el medio para el que trabaja? ¿O sólo se limitará a elaborar su nota, sin leer nada más de lo que el medio publica?
¿No merecería una DENUNCIA PENAL esta publicidad, por promocionar una empresa que ya no existe, que continúa como si nada, y que engañó a sus usuarios al no informar debidamente, tal como pregona la periodista Adriana Santagati que debería hacerse, mencionando la Ley 24.240?´
Mientras tanto, las mentiras y los ocultamientos continúan. Sería bueno que los mismos usuarios se rebelaran contra el engaño, en lugar de sumarse a una campaña mentirosa.
¿O se tratará de ACTORES, en lugar de CLIENTES?
Porque si son actores los que participan de la publicidad, podría entenderse: trabajo es trabajo...
Pero si en cambio son clientes...entonces, ¿no serán CÓMPLICES de una estafa?.
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¡Buenas noticias por el lado de la Justicia!
El día 15/09/10 salió publicada esta noticia en el diario Tiempo Argentino:
Multan en $ 5 millones a Cablevisión por engañar a los clientes de la ex Fibertel
Por
Defensa del Consumidor le aplicó la sanción económica más alta por vulnerar tres artículos de la ley. La desaparecida firma siguió prestando el servicio de forma irregular y haciendo campañas en la vía pública, pese a no contar con autorización. Aquí la nota completa:
Están empezando a respirarse otros aires, no?
Ya era tiempo!
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